La burocracia, proceso sin direccion

Las empresas extranjeras no se instalan en España por la burocracia, el papeleo es asfixiante.  El  exceso  burocracia no es algo que ocurra sólo a cierto  nivel sino que está igualmente en los niveles más básicos como ofrecer un servicio profesional o comprar algo. Si uno compara un trabajador por cuenta ajena en EEUU y en España. En EEUU para trabajar como autónomo todo lo que tiene que hacer es sacar un certificado de DBS (Doing Bussinness As, haciendo negocio como) que cuesta 100 $ por vida, te lo dan en el momento; cada vez que uno factura más de 500$ rellena un formulario que va a hacienda; se hace la declaración una vez al año. En España hay que darse de alta en actividades económicas, elegir la casilla si se tienen varias ocupaciones parecidas ( por ejemplo enseñanza y trabajo profesional) hay que darse de alta en dos casillas diferentes. Luego hay que darse de alta en la seguridad social y pagar un mínimo de 280 al mes. Como muchos de los autónomos no trabajan todo el año sino sólo unos meses se dan de alta y de baja cada vez que tienen actividad. Además los autónomos tiene que hacer las declaraciones del IVA trimestrales y luego la anual. Para comprar una pieza de una maquinaria o cualquier consumible especializado  un simple cable por internet (mucho más barato e incluso inexistentes en las tiendas locales)  hay que hacer un despacho de aduana, para lo cual hay que rellenar un formulario imposible de múltiples páginas, pagar a una gente de aduanas o  ir a Alcobendas a hacienda donde se espera el despacho por varias horas.

Capitalismo significa que el gobierno solo interviene en aquellos casos de fuerza mayor en los que el sistema se está desequilibrando. El libre mercado implica que las transacciones, compras, servicios se hacen de forma libre sin apenas intervención y con fluidez. Un ejemplo de falta de intervención del gobierno con los derivados ( el objeto que de inversión en el que se transformaban las hipotecas) que a diferencia de estas no tenían referencia real.

Dice Sergio Tombesi, economista, “En nuestro sistema capitalista, el gobierno actual no sólo no  cumple la  función estabilizadora de compensar cuando hay un desequilibrio sino que además se ocupa en incrementar los obstáculos para impedir que el movimiento se dé. Es lo peor del capitalismo, el gobierno no interviene para evitar desastres y lo peor del libre mercado, el gobierno obstaculiza el flujo libre con una burocracia interminable”. No hay dirección ni orden  solo hay proceso. Es la burocratización, el bloqueo sistemático y sin sentido. Pero el origen del gobierno, (presente en  su etimología “gobierno” del griego kibermetes= piloto de nave.) es la de dar una dirección, pilotar.

Desde los indignados  hasta los líderes europeos se habla de la desconfianza del individuo en las instituciones. Hay duda que  la institución  y  el gobierno su máximo exponente, está trabajando para el individuo.  No se habla del hecho  que  el gobierno trabaja en contra del estado  y no sólo en contra del individuo. Estado se usan indistintamente con gobierno pero literalmente define  un país en un momento concreto. Pues bien aquí hay una falta de semejanza entre ambos, el gobierno (con la burocracia, aplicación sistemática y sin discriminación ni objetivo del trámite) actúa en contra del estado.  Esta diferencia es fundamental ya que  la pregunta  “esta  la institución está a favor del individuo” se extiende a esta otra pregunta, “está la  institución a favor del estado?” y así el malestar de los grupos de protesta como los indignados se extiende a un malestar general.

Jana Leo

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